La pérdida de un diente

Cuando se pierde un diente lo ideal es sustituirlo siempre. A veces los pacientes solo lo quieren hacer, si es un diente incisivo, o un canino, es decir un diente delantero.
Los pacientes ponen el pretexto que; “total, como no se me ve …“.
Pero ¿cuáles son las razones por las que debemos sustituirlo también si no se ve al sonreír?

La pérdida de cualquier pieza dentaria puede llegar a tener unas consecuencias negativas en nuestra calidad de vida, y por supuesto en nuestra salud bucodental.

Cuando se pierde un diente las piezas adyacentes tienden a desplazarse progresivamente hacia el espacio que está perdida ha dejado, moviéndose los dientes hacia el espacio donde se realizó la extracción, así como el diente antagonista superior o inferior también se mueve para ocupar dicho espacio.

Este movimiento de las piezas en la boca, como consecuencia provocará que se pueda impactar alimento entre los dientes, generando problemas en las encías, e incluso futuras caries.

También puede producir alteraciones en la oclusión, provocando dolor tanto en los dientes, como en los músculos circundantes, y así se puede llegar a producir una patología en las articulaciones temporo-mandibulares.

Clínica Indenta: 
Implantes dentales en Alicante

La colocación de un implante, o la reposición de la pieza con prótesis fija, previene estos problemas, que como hemos comentado, van más allá de los problemas meramente estéticos.

Con el paso del tiempo en la zona de la pieza extraída también se perderá el hueso remanente lo cual dificultará la futura colocación del implante.

A medida que pasa el tiempo y no reponemos las piezas dentarias con un implante, los dientes puede moverse y necesitar en un futuro una ortodoncia, que reponiendo el diente a tiempo sería innecesaria.

En Indenta podemos ayudarte a recuperar tu calidad de vida con unos dientes fuertes, y con una estética y función igual que los dientes naturales.

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